miércoles, 14 de agosto de 2013

Caballos en la nieve


Una historia de caballos. Un historia típica de Cuentos negros. Recuerda Stalingrado, aquellos relatos de los soldados alemanes que, al borde de la inanición, mataban a sus caballos y se comían sus sesos. Una historia de caballos y de hombres que mueren congelados en medio de la estepa, apretujados, unos contra otros; cadáveres olvidados en las cunetas de la Historia, abandonados por los señores de la guerra, víctimas, al cabo, de su inocencia, de su credulidad estéril. Víctimas anónimas –decimos- pero también partícipes del crimen, actores irremplazables, ejecutores al dictado de la sinrazón no inocente de los titiriteros. 

Historias de caballos y de hombres. Y en el centro de una de ellas, un caballo agonizante junto a su jinete muerto, en las ruinas de una ciudad en llamas, durante los primeros días del crudo invierno de 1943. El animal se desangra por la herida de metralla que le ha perforado el cuello. Un grupo de soldados desesperados pasa muy cerca. Poco después de muerto, alguien dará cuenta de él.

2 comentarios:

  1. A veces tengo la desagradable sensación de ser un solado en una guerra, y no se en qué bando me ha tocado. Me preocupa tener que decir algún día "yo n o sabía, sólo ejecutaba órdenes, etc".

    Te pego un video que te gustará sin duda:
    http://youtu.be/CGlzvgTPieE

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  2. Muchas gracias, Lluís.
    Voy a echarle un vistazo.

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